Las opciones van desde tiras, enjuagues, geles, cremas dentales que se venden en las farmacias, hasta tratamientos con el dentista. Si bien estos funcionan, algunos requieren paciencia y otros, tolerancia al dolor.
 |
Si no sabe si estos métodos son saludables y efectivos para blanquear sus dientes, The New York Times le da una respuesta y explica algunas verdades que hay que tener en cuenta sobre este tipo de tratamientos.
1. Cuidado con el peróxido de hidrógeno. Este agente presente en muchos blanqueadores y que se utiliza en las salas odontológicas puede generar sensibilidad en los dientes e irritación en las encías. Entre más alta es la concentración del peróxido usado, más severos pueden ser los efectos de su uso, dice el medio citado.
2. Sobre el uso de calor o láser. Los médicos recurren a estas otras técnicas para activar los agentes blanqueadores. Aunque sean también utilizadas, una revisión en la revista Materiales Dentales no encontró beneficio añadido del calor, la luz o el láser y sugirió que estos métodos "pueden tener un efecto adverso sobre el tejido pulpar", el material blando en el centro del diente. Si este se lesiona por el uso de este método, podría requerir un tratamiento de conducto para arreglar.
3. La luz caliente tiene un efecto deshidratante sobre sus dientes, lo que los hará lucir más blancos. The New York Times indica que pueden tomar semanas para que los dientes se rehidraten y se oscurezcan ligeramente.
4. Antes de cualquier blanqueamiento, hay que verificar la buena salud dental. Un experto citado por el medio estadounidense asegura que, incluso, cuando se hace en casa, un dentista debe comprobar que coronas u otras prótesis dentales estén en buen estado, pues de no ser así la aplicación de peróxido sería muy sensible.
Al respecto, Miguel López Andrade, vocal del comité ejecutivo del Consejo General de Dentistas de España mencionado por Infosalus.com, señala que el tratamiento con peróxido de hidrógeno no puede ser aplicado en personas que padezcan sensibilidad dental, problemas gingivales o patologías como la estomatitis u otros trastornos de la boca.
5. El color no quedará igual si tiene rellenos de resina. Una revisión de 2014 del profesor Clifton Carey, de la Escuela de Medicina Dental de la Universidad de Colorado, advirtió que los rellenos que están diseñados para que coincidan con el color de los dientes, puede volverse más más amarillos después del uso blanqueadores, incluso de droguería. O bien, si los dientes quedan más blancos, y el relleno no, este último podría destacarse, indica el New York Times.
Fuente: pulzo.com
Disqus comments