Prótesis dentales, innovaciones y "la evolución del puente"

La pérdida de piezas dentales es uno de los problemas más habituales de los pacientes que acuden a los consultorios odontológicos. Sin embargo, más allá de la estética, la pérdida de dientes puede provocar una serie de alteraciones; pérdida de equilibrio en la posición y fuerza del aparato masticador, dolores en las articulaciones temporomandibulares, dolores a nivel de la musculatura cérvico–facial, cefaleas y movimientos patológicos de los dientes vecinos.




Según afirma Antonio Hurtado, presidente de la Sociedad Colombiana de Odontología estetica (SCOES) la solución para esta complicación es un tratamiento de implantes, ya sean removibles o fijos. Pero, ¿cuáles son las características y diferencias entre estos dos estilos de prótesis? ¿Cuál es la mejor opción según la necesidad del paciente? A continuación trataremos de responder a estas preguntas.

Prótesis fijas, mayor seguridad al usar su boca

Las prótesis fijas son aquella opción clásica que conocemos popularmente como puente. La sujeción de estas se consigue gracias a los dientes colindantes que sirven de anclaje para el tramo protético.

Este tipo de prótesis fija consiste en dos fundas unidas a una pieza intermedia, o más, que queda sobre la encía, tocándola pero sin unirse a ella. Una funda es una muela artificial hueca, colocada sobre un diente natural que previamente se talla para dejar espacio al grosor del material de la prótesis. De este modo se reponen, por ejemplo, muelas perdidas, aprovechando las que quedan.

No obstante, gracias a los avances científicos y tecnológicos de la estética dental, ahora se dispone de técnicas quirúrgicas poco invasivas, que permiten reponer las piezas ausentes mediante la colocación de implantes osteointegrados, que utilizan materiales más novedosos, estéticos, fiables y biocompatibles , que permiten, a su vez, permiten obtener resultados estéticos excelentes, fiables e individualizados.

Esta opción da al paciente mayor seguridad al masticar, reírse y hablar, puesto que eliminan casi al 100% el riesgo de desprendimiento o la sensación de aflojamiento de la prótesis. Sin embargo pueden causar problemas de encías en caso de que la higiene oral no sea la adecuada.

Otra de las características relevantes es el precio de esta clase de implantes, ya que son más costoso que los implantes removibles.

Prótesis removibles, mayor flexibilidad y menor coste

En las prótesis removibles, los nuevos dientes se unen a los implantes mediante un dispositivo de conexión como un clip y una barra. Una de las ventajas de este tipo de prótesis, es que pueden ser retiradas para cumplir con los hábitos de limpieza bucal. También este tipo de prótesis se acomodan más fácilmente a los presupuestos del paciente.

Sin embargo, este tipo de implantes pueden salirse de su lugar en los momentos más inoportunos, o producir el clásico “clac, clac” al hablar o al comer y pueden provocar problemas mayores como la pérdida de hueso. Además pueden presentarse reacciones alérgicas a los materiales utilizados.

No obstante los avances en el tratamiento ofrecen nuevas prótesis removibles que garantizan mayor adherencia, son hipoalérgicas y presentan mayor flexibilidad, lo que ayuda a mantener la integridad del implante.

Fuente: hechosdehoy.com